DISCURSO DEL PRESIDENTE, EVO MORALES AYMA. PROMULGACIÓN DE LA LEY DE CONSULTA
La Paz, Palacio de Gobierno 10-02-2012.- Hermanos indígenas marchistas:
Estaba revisando su plataforma, el pliego de la marcha, y titula lo siguiente: “Marcha indígena, originaria del TIPNIS, plantea la anulación de la Ley Corta y pide la construcción de la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos”.
Quiero decirles, hermanas y hermanos: Unos marcharon rechazando la construcción del camino, otros marcharon pidiendo la construcción de caminos. Para quienes estamos aquí, es difícil entender quién tiene la razón, ¿la primera marcha tiene razón? ¿Es esta segunda marcha la que tiene, con relación a la construcción? ¿La primera es de la gente que vive en Isiboro Sécure?, ¿o es ésta la verdadera marcha de los que viven dentro del parque?
Nos informan que aquí hay 40 corregidores. En la primera marcha, creo que empezaron con 10 corregidores y, finalmente, se retiraron. He escuchado, en algunos medios de comunicación, que algunos empezaron a marchar y se sintieron engañados, por eso se retiraron y se plegaron a esta marcha.
Recuerdo el día en que llegaba la marcha a la ciudad de La Paz, en octubre del año pasado. A una compañera le entrevistaron y decía: “estoy marchando por la carretera”. Seguramente esta declaración está grabada en los medios de comunicación.
Entonces, es tan difícil entender, hermanas y hermanos. Sin embargo, quiero informar que la Ley Corta a la que se refieren, yo diría que fue una ley impuesta al gobierno nacional. Si ustedes hubieran querido imponer a la Asamblea Legislativa Plurinacional, seguramente hubieran planteado la anulación, como señala su plataforma. Saludo su comprensión. Como ha informado nuestra Presidenta del Senado, han trabajado días para concertar la Ley de Consulta.
¿Cómo unos rechazan, y otros quieren el camino? Es mejor que la gente que vive ahí, dentro del parque, decida si quiere o no quiere el camino. Es lo mejor.
Estos días estuvimos escuchando acerca del rechazo a la Ley de Consulta. Quienes rechazan la consulta están rechazando la Constitución, porque la consulta está garantizada por nuestra Constitución Política del Estado Plurinacional. Quiénes rechazan la consulta, hermanas y hermanos, están rechazando los convenios, los acuerdos y normas internacionales: de la OIT (Organización Internacional del Trabajo), y de Naciones Unidas.
Naciones Unidas aprobó, después de casi 30 años de lucha (he sido parte de la misma), la Declaración sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas. Reconoce el derecho de los pueblos indígenas del mundo; en esta Declaración, también reconoce la consulta a los pueblos.
Para información del pueblo boliviano: Bolivia fue el primer Estado que aprobó, mediante una ley, la Declaración de Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas. Hasta ahora, creo que en Sudamérica, unos tres Estados, la ratificaron. Nosotros fuimos los primeros. Fue el anterior Congreso Nacional, antes de la fundación del Estado Plurinacional. A los ex diputados y ex senadores: un voto de aplauso, porque trabajaron, de manera consecuente con las decisiones que se tomaron.
Ahora buscan cualquier pretexto para rechazar la consulta. ¿Saben qué pienso hermanas y hermanos? Están rechazando la consulta porque, cuando se efectúe la misma, a la gente que vive dentro del TIPNIS, van a perder, por eso, anticipadamente, la están rechazando. Porque, si uno está seguro de que mis bases, mis compañeros, van a rechazar la consulta, o la construcción del camino, no estaría haciendo escándalo en los medios de comunicación. Estaría seguro, como dirigente regional o nacional, de que, por más que haya una consulta, la van a rechazar, pero, como van a perder, la están rechazando.
No puedo entender (bueno, todavía sigo siendo dirigente sindical, de manera simbólica), cómo los dirigentes regionales o nacionales pueden estar aislados de sus bases. No lo puedo entender.
Hace un momento, nuestro hermano yuracaré decía: “Hemos convocado muchas veces”. Mi sugerencia, hermanas y hermanos: sigan convocando, vayan a explicarles a sus comunidades la Ley Corta; tienen obligación de explicar a sus bases el tema de la intangibilidad.
Si sus dirigentes tienen razón, con seguridad que en la consulta rechazarán la construcción del camino y se respetará la Ley Corta. Convocamos también a las ONG que están rechazando la consulta. Estoy casi seguro que la marcha del año pasado fue una marcha de las ONG y no de los hermanos indígenas que viven en el Parque Isiboro Sécure. Si en la consulta deciden rechazar el término de intangibilidad, y deciden construir el camino, las ONG que impulsaron, que financiaron, la marcha anterior, van a quedar mal ante sus financiadores. Tal vez pierdan su plata también; es el miedo que tienen algunas ONG.
Invitamos, convocamos (convoquen ustedes) a todas las ONG, que financiaron, para que vayan allá. Si sus dirigentes no pueden explicarles, que las ONG vayan a explicarles a ustedes, hermanas y hermanos, por qué tienen que defender la Ley Corta.
Hay que reconocer que, tal vez, desde el momento de la aprobación de la nueva Constitución, deberíamos haber preparado y avanzado, rápidamente, en la Ley Marco de Consulta. No se hubieran presentado estos problemas: las marchas, sobre un tema específico. Pero esto es más democrático, aquí el pueblo participa, expresando: sí o no. Esta consulta será legítima, legal, y constitucional.
Me animaría a decir, hermanas y hermanos, ¿por qué no impulsar (si alguna gente, si algunas ONG, todavía se oponen), por qué no consultar, mediante un referendo, a los dos departamentos, a los dos municipios directamente beneficiados? Que ellos también expresen con su voto finalmente, si quieren o no el camino; eso es democrático.
Pero, como a veces hay intereses de carácter económico, especialmente de las ONG; intereses de carácter político… ¿Por qué digo político? Porque quiero que sepan: he detectado ese interés no solo en este tema del camino, sino también en la construcción de puentes, en la implementación de nuevas empresas del Estado, para que generen divisas para el pueblo, así como en nuestra empresa más grande, Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos. Cuando estamos en esa tarea, hay algunos que se oponen.
Quiero decirles, con mucha sinceridad, hermanas y hermanos, ¿saben qué quieren?: perjudicar, perjudicar y perjudicar. Y, cuando llegue el 2014, cuando esté acabando mi gestión, ¿qué van a decir? Me van a decir: ¿dónde está el camino?, ¿dónde está el puente?, ¿dónde está la planta hidroeléctrica?, ¿dónde está la industrialización? Por eso ahora la cuestión es oponerse y oponerse, con cualquier motivo.
Yo salvo mi responsabilidad ante ustedes, ante el pueblo boliviano, denunciando estas maniobras, pues con ellas quieren perjudicar. Quiero convocar a todos los movimientos sociales, a los organismos internacionales, al Defensor del Pueblo, a la Asamblea Permanente de Derechos Humanos, a que vayan al Isiboro Sécure. No seamos buenos para hablar sólo en la ciudad, desde el escritorio, sino, hablemos cómo viven nuestros hermanos.
Los movimientos sociales, incluida la CIDOB, que acompañen la consulta; si los dirigentes de la CIDOB no quieren camino y quieren intangibilidad, que vayan, comunidad por comunidad, como dirigentes nacionales, a explicarles a ustedes, a los corregidores. Es lo mejor que pueden hacer.
Si quieren seguir figurando, con el tema de TIPNIS, en los medios de comunicación, tienen derecho, pueden hacerlo. Ustedes y sus bases serán los que definan.
Me ha sorprendido, por ejemplo, que ustedes, en la plataforma, no solo están pidiendo la construcción del camino troncal, de un departamento a otro departamento, de un municipio a otro municipio. Están pidiendo: en el punto 1ro, inciso b, la construcción de caminos vecinales. Ustedes saben por qué están planteando eso. Algunos hermanos quieren sacar sus productos, por eso, seguramente, observan el término intangibilidad. Al margen de estas reivindicaciones, el tema central es la construcción del camino.
Cuando algunos expertos en medio ambiente decían que el camino tiene que dar la vuelta por arriba o por abajo, me causa risa. Ustedes saben muy bien, los que viven ahí dentro; yo he recorrido poco, ahora recién estoy conociendo. Pero, decir que de la vuelta, por arriba o por las serranías, por la provincia Ayopaya, ¿dónde bajaría? Sería peor por los desastres naturales; cuando dicen: hay que ir por abajo, no se dan cuenta que está la laguna “Bolivia”, bajiales, pantanales, ¿cómo se puede construir por ahí el camino? Ustedes conocen muy bien.
Saludamos el conocimiento de los ambientalistas, su aporte para conservar el medio ambiente, para defender los derechos de la Madre Tierra, pero, no podemos ser todos tipnílogos. Ahora todos son tipnílogos; todos los del Isiboro, todos saben, pero sin conocer, sin pasar por esas zonas.
Repito, yo conozco poco, he caminado, no siempre con ustedes, pero ustedes conocen mejor que yo y que el pueblo boliviano. Lo mejor para mí es, hermanas y hermanos, la consulta. Algunos están diciendo que es inconstitucional; si es inconstitucional, entonces, ¿para qué están haciendo bulla en la prensa? Que presenten una demanda de inconstitucionalidad al Tribunal Constitucional y se acabó. Que este Tribunal juzgue si la Ley es inconstitucional. Yo digo, ¿cómo una ley de consulta al pueblo, para decir sí o no, puede ser inconstitucional?
Perdonen los ministros, los abogados, algunos, por cualquier motivo, encuentran alguna figura jurídica para perjudicar. Por encima de cualquiera situación jurídica, lo que quiero que sepa el pueblo boliviano es que allá –en el TIPNIS- hay extrema pobreza. Yo mismo me siento cuestionado.
Por eso quiero pedirles disculpas a ustedes, a la anterior marcha; lo dije en las reuniones: a los compañeros que están escuchando en el parque Isiboro Sécure: hemos estado en todas partes, con los hermanos quechuas, aymaras, guaraní (que también son indígenas). En casi todas partes había estado yo, menos en el Isiboro Sécure. Cuando llegamos, realmente duele, hermanas y hermanos, la situación en que viven.
Ustedes tienen la obligación de hacer respetar sus derechos; la consulta es un derecho, un derecho que ha costado años; si hablamos de la Colonia, nuestros antepasados sufrieron una invasión. Posteriormente durante los distintos gobiernos, nunca ayudaron a resolver las demandas del movimiento indígena campesino en Bolivia. Y ahora, en esta gestión, cuando queremos integrarnos, cuando queremos resolver esos problemas, no faltan algunos hermanos, nuestros aliados, con los eternos enemigos del movimiento indígena, que protestan.
Siempre ha habido gente que nos ha abandonado, gente que nos ha traicionado. Sólo ustedes, las nuevas generaciones, el pueblo, algún día juzgarán quiénes tenían políticas acertadas, o equivocadas.
Si nuestra propuesta, de construir camino, de Villa Tunari a San Ignacio de Moxos, estaba equivocada, en la consulta ustedes definan, decidan, y digan si estabamos equivocados: vamos a respetar, por supuesto, hermanas y hermanos. Pero la última palabra es del pueblo.
En algún momento había pensado (saben los ministros y ministras) que tal vez era mejor un referendo intermunicipal o interdepartamental, para definir si se hace o no el camino.
Entiendo el esfuerzo de ustedes; me acusan que de hemos organizado esta marcha. Desde el primer momento me opuse. Yo no estaba de acuerdo con la marcha de ustedes, lo digo públicamente, aunque me riñan. Yo decía: las marchas son sacrificadas, aunque creo que algunos movimientos sociales han sido muy solidarios con la marcha. Siempre nos van acusar, de cualquier lado, gente que no quiere al movimiento indígena, que no quiere resolver la pobreza en que viven en el parque Isiboro Sécure.
Saludo a los jóvenes de las ciudades que se dieron cuenta de que es importante defender los derechos de la Madre Tierra, pero también quisiéramos que vayan allá, que conozcan para ver de cerca si necesitan o no camino para mejorar su situación. No solo deberíamos informarnos por los medios de comunicación, sino entrar a conocer a los hermanos indígenas, su vivencia, su sufrimiento. Saludo su esfuerzo, esperamos que busquen a sus dirigentes regionales, nacionales, para que expliquen por qué es importante la consulta, por qué deben respetar ese derecho constitucional de los pueblos indígenas; o que ellos les expliquen a ustedes por qué hay que respetar la Ley Corta. Los resultados de la consulta respetaremos como gobierno nacional.
Después de promulgada la Ley Corta, la tarea de los dirigentes era informar y explicar, comunidad por comunidad. Esa es la tarea de un dirigente, de un representante. No es tarde todavía, porque todavía no hay consulta; entonces deberían los dirigentes entrar allá y explicar a ustedes, si realmente son sus dirigentes; pero, si no son sus dirigentes, entonces seguirán, como decíamos en el trópico: como chitacos, detrás de las ONG, y no de sus bases. La tarea del dirigente no es andar detrás de las ONG, sino de sus bases; eso es ser dirigente, hermanas y hermanos. Por eso nuestra convocatoria. Todavía hay espacio: que vayan a explicar para que ustedes, de manera conjunta con sus dirigentes, definan, mediante la consulta, sobre el término de intangibilidad, y la construcción del camino.
Muchísimas gracias por su presencia. Sé que algunos, tal vez todos, están por primera vez en el Palacio; quiero que sepan, acá están muchos sectores sociales. Quiero que sepan que, cuando llegué a diputado, era difícil entrar, hasta de diputado. El 97, cuando gané la diputación, a mi posesión, al acto del 6 de Agosto, no me dejaron entrar a la plaza Murillo. En la calle Comercio la Policía me detuvo; ya era diputado, me costó entrar a la plaza Murillo.
Luego, entrar acá era para asustarse: el 2002 me invitaron; cuando entramos, con otros diputados, nos asustamos: arrinconaditos, nos hemos quedado, así que, media vuelta, nos hemos ido. Nos miraban feo, nos hacían asustar, algunos diputados, como Félix Santos, me acuerdo siempre, con su abarquita, y, además de eso: tenía el pie reventado, lo que en aymara decimos kakalla. Perdonen, que me disculpe el hermano Félix Santos: un dirigente, excelente, dirigente de Potosí, ex dirigente ahora. Estaba el hermano Bailaba también. No me acompañó, pero algunos diputados me acompañaron; nos asustamos, y nos retiramos. Ahora, hermanas y hermanos, esta es su casa, su casa grande, acá pueden buscar sus reivindicaciones.
Saludo su paciencia, su comprensión, la negociación de ustedes. Si hubieran sido intransigentes, seguramente hubieran pedido la anulación de la Ley Corta o nada. Quiero que sepa el pueblo boliviano, el verdadero movimiento indígena no ofende a nadie. Se han encuartelado en el coliseo; no perjudicaron, no salieron a las calles a perjudicar al pueblo paceño, realmente merecen un aplauso.
Esperamos que sea un modelo de organización y reivindicaciones. ¡Nosotros marchábamos tanto! Sabe nuestra compañera Leonilda Zurita; cuando llegamos con la marcha, para no perjudicar al pueblo paceño, los compañeros se quedaban en la Universidad, que nos alojaba, y sus dirigentes nos acompañaban con la huelga de hambre.
Una vez salimos en marcha, pero, no por la calle, sino por las aceras, la gente nos felicitaba; qué bueno que no hayan perjudicado. Recuerdo que con nuestros cartelitos caminábamos, explicando, después de llegar con la marcha. Ustedes llegan con la marcha, no molestan al pueblo paceño, negocian con la Asamblea Legislativa Plurinacional (siempre cuesta negociar). Yo decía, como dirigente: es mejor estar en la marcha, en huelga de hambre, en un bloqueo, que negociar; la negociación es lo peor, es lo más difícil para los dirigentes. Saludamos el acuerdo y esperamos que la consulta, sea por el no, o por el sí, les beneficie, hermanas y hermanos. De eso se trata.
Muchas gracias.